lunes, 25 de agosto de 2008

Que tiene el dinero...

¿Qué tiene el dinero que les seca el alma?
¿Qué tiene el dinero que todo lo abarca?


Destruyen la vida, la fe y la esperanza…
Por unas monedas con brillo de plata…


¿Qué tiene el dinero, que los embelese?
Que les brinda siempre; una paz que es falsa…


¿Dónde esta la vida detrás de esa farsa?
¿Dónde la alegría, y la paz del alma?

El compra ilusiones, las vende baratas,
Les moldea mil sueños, pero son fantasmas…


¿Qué tiene el dinero?,
que a la real belleza, la oculta y la calla…

¿Qué tiene el dinero?

que los vuelve ciegos, de conciencia y alma…


El; es solo un medio, él en sí; no daña,
Es el poderío que con él se obtiene,

lo que los atrapa...


No es él; quien decide el fruto que daña…
Su poder corrompe si olvidas la trama.


Y se sienten Dioses,
Violando principios, violando distancias,

Viviendo sin leyes, sin reglas, sin nada…


Nada los limita, todo lo avasallan…
y Ellos buscan dicha, detrás de su falla…

Y la buscan siempre, porque no la alcanzan…


La dicha les huye, pues su paz es falsa.
Y buscan llenarse, con compras baratas,

De marcas que ''brillan,''

mucho más que su alma!


Ese señorío que tanto presumen…
sólo está en su facha.

Nunca en su conducta…

Nunca en sus palabras…

Es simple apariencia, pantomima y farsa…


Y ellos creen que engañan,

Que el simple oropel, cubrirá su cloaca…

¿Cómo es que lo piensan?

¡Si todo en su vida, se reduce a estafa!


Y que dicha es esa,

Esa que a la vida, no le da sosiego,

Ni le da alegría, ni fe, ni esperanza.

Ostentan palacios, con sus grandes salas,

Ostentan sus pieles, sus carros de marca…

No ostentan decencia, ni piedad del alma…


Y nunca presumen; del amor que abraza.
Ellos desconocen, todos los valores

Que en verdad agradan…


Para ellos no cuentan, todas nuestras luchas,
Ni el valor que entrañan...


Ellos no saben vivír como la gran mayoría
¡Porque son la mayoría!

¡Los que respetan la vida!

Los que luchan cada día con la conciencia tranquila!

Los que saben de esperanza de piedad y de armonía...

Los que perdieron el miedo,

porque creen en la bondad,

en el amor y en la vida...

porque saben que la fe es una fuerza divina.

Y que el camino a seguir el corazón nos lo dicta.


Ellos no comprenden, todo lo que vale

La conciencia limpia, y la paz del alma.

Esa solamente, la logran los hombres,

Que viven de acuerdo con todas las normas,

Que el amor emana…


Si tú quieres ser feliz; ten en cuenta estas palabras,
Pues el camino a seguir, el corazón lo señala…

Le dice a la vida ¡sí!

Dándole un ¡sí! a la esperanza,

El corazón nos lo muestra,

Y ¡el corazón nunca falla!

Recuérdalo siempre,

Siempre, que tú pienses

Que la dicha plena,

¡Se compra con plata!

Ma Socorina Tonella R

A mi Tijuana querida

Hay una Tijuana viva muy dentro de nuestra alma
Una Tijuana que grita…

Una Tijuana que calla…

Una Tijuana que aun sueña…

Otra Tijuana que marcha.


Día tras día, violencia…
Violencia que nos oprime...

Violencia que nos desgarra...

Violencia, que nos define, violencia que nos atrapa


Pensando siempre en mañana…
Mañana será otro día…
Mañana será mañana.

Prolongando una agonía que ya no encuentra cuartada…


Sueños que no se han dormido
Sueños de azul escarlata

Soñar con esa alegría de la libertad amada…


Abrir de nuevo las alas que nos fueron arrancadas,
Emprender por fin el vuelo…

Que los abuelos soñaran…

Soñar los sueños despiertos…

Soñar, soñar ¡que no cuesta nada!


Se oyen rezos cada noche

Rezos cada madrugada…

Rezos en las azoteas…

Rezos en cada ventana…

Rezos que nunca se cansan…

Por esta Tijuana mía, que aun estando tan herida…

¡Sigue batiendo sus alas!


Ma Socorina Tonella R

miércoles, 20 de agosto de 2008

Y me llaman viejo

Que mi caminar es lento,
Y la memoria me falla…

Que mis piernas no responden,
Y mis palabras no estallan…

Es cierto que ya no corro…
Pero no porque sea viejo…

Los caminos que recorro no se miden en distancia…
Son caminos que la mente en un santiamén alcanza…

¿Me dicen que soy muy torpe,
Porque no encuentro mis gafas?

Sin embargo encuentro amor
Donde otros solo escarcha…

¿Que mis oídos no oyen, Y mis ojos no ven nada?
El oído no me importa, no sabe escuchar la calma…

Y si necesito ver, los ojos no me hacen falta…
Porque tengo un corazón, que sabe mirar el alma.

Es verdad que soy un viejo
Lo digo sin titubear…

Las marcas que hay en mi rostro
Son señales que la vida, se ha empeñado en registrar…

El tiempo no nos perdona…
Las cuentas hay que saldar…

Son cosas que solo el tiempo
Nos ayuda a descifrar…

¡Hoy a los cielos sonrío!
¡Hoy la vida se gozar!

¡Que lastima!
Que a destiempo…
¡La vida empiece a contar!


Ma Socorina Tonella R